lunes, 30 de enero de 2017

Las cinco etapas que experimenta una persona cuando pierde un ser querido


Las personas que pierden un ser querido experimentan una serie de emociones que al no ser bien llevadas pueden provocar en la persona depresión clínica,por eso es importante conocer què etapas se viven cuando muere una persona muy cercana y querida.Es importante que la persona se entendida y no juzgada si expresa su dolor de manera abierta.No se le puede privar del llanto ni de la ira,tampoco se le puede decir que tenga fe o que sea fuerte.El momento de la pérdida del ser querido simplemente la fe baja, el dolor es grande y las fuerzas son pocas.Hay que saber dirigirle a esta persona a un consejero o a un especialista,si no logra superar el luto en u tiempo mas o menos de un año.Esto quiere decir que la persona no ha vivido bien su duelo o se ha reprimido.Cuando se reprime y no se saca emociones,la persona tiene a perder mas la esperanza y el sentido de la vida.Por eso les invito a leer las etapas por las que la persona puede pasar para ayudar:

1.La negación.- Es la primera etapa del duelo, la primera que nos ayuda a sobrevivir la pérdida. La persona no puede creer que su ser querido se ha ido. Estos sentimientos  son importantes, ya que se convierten en mecanismos de protección  de la psique. El mismo organismo no permite que vivamos todos los sentimientos a la vez y por eso la persona se centra en que no es real lo que está pasando. Es una etapa de cuestionamiento de la realidad que se está viviendo: “es verdad?” “ha pasado realmente” “Es verdad que ya no está?”.

La vida pierde sentido, hay conmoción y negación de los hechos. El superviviente se pregunta si debe seguir adelante o no. En muchos de los casos se halla contando una y otra vez su historia de pérdida. Es una forma de enfrentar los traumas. Es una manera de negar el dolor, mientras se acepta la realidad de la pérdida.

Al bajar la intensidad de esta negación la persona está consciente de la pérdida. Se intenta buscar explicaciones: ¿tenía que suceder? ¿Podría haberse evitado? Conforme  vamos aceptando la realidad  y hacemos preguntas, se inicia sin saberlo el proceso de curación.

2. La ira.-La persona está enfadada por encontrarse en una situación que no esperaba, merecía ni deseaba. La ira es otro indicador de la intensidad de amor hacia la persona perdida. Aflora cuando estamos lo bastante seguros como para saber de qué sobreviviremos, pese a todo. A la ira le siguen otros sentimientos: tristeza, pánico dolor, soledad con más intensidad.

La ira es una reacción natural. No es necesario juzgarla o buscarle un sentido. Lamentablemente este sentimiento que en lugar de unirnos a nuestros amigos o familiares nos termina aislando en esos momentos en que más los necesitamos. Pero no hay que tener miedo, la ira va cambiando y saldremos para ir a otra etapa.

Esta etapa se manifiesta de muchas maneras: ira contra el ser querido por no haberse cuidado mejor, o contra nosotros mismos por no haberlo cuidado mejor, ira contra los médicos  por no tener la capacidad de salvar a la persona; se extenderá a Dios cuestionando su amor, su poder, su compasión; o simplemente  se estará enojado por  lo malo que le pasó a alguien que no se merecía.

La ira surge como culpa. Pero no tenemos la culpa porque no tenemos el poder de cambiar las cosas.
Por otro lado, la ira surge y nos confronta con nuestras creencias. Se desmoronan muchos de nuestros supuestos : Creer que si hacemos lo bueno, los males de este mundo no  nos  tocará; creer que si hacemos todo lo que nos dicen, seremos premiados; pensamos que si nos cuidamos físicamente, comemos sano, hacemos  ejercicio, tendremos buena salud y larga vida.

Pero la ira es buena y  necesaria para sanar, aunque parezca que no es así. Es una emoción útil y nos visitará muchas veces y en múltiples formas. Cuanto más se sienta la ira mucho mejor porque así sanaremos.

Debemos evitar cuestionar a la persona por experimentar este sentimiento, caso contrario puede alejarse. Hay que dejar que las personas manejen la ira el tiempo que sea necesario. A la gente le gusta que la acepten tal cual y más cuando están en duelo. Hay que ayudar al que ha sufrido una pérdida  que  exprese su ira, solo así se dará cuenta que Dios es bastante fuerte  para sentir piedad y amor por nosotros, incluso si estamos enfadados con él. Una forma de expresar la ira, sin daño a la persona, es gritar  las veces que sean necesarias, contarlas a un consejero o amigo o realizar actividades que permitan exteriorizar la ira, tales como: andar,  nadar, cultivar el jardín.

3. La negociación.-En esta etapa empezamos a vivir un proceso en el que queremos prevenir todo. Queremos hacer cualquier cosa para que nuestro ser querido  siga con vida. Queremos que la vida vuelva a ser como  era antes. Empezamos a pactar con Dios  “Si  permites que viva nunca más me enfadaré”, “Queremos volver a verla en el cielo”. Pactamos para que nadie más en la familia enferme, para que no haya más ninguna tragedia, para que los hijos sigan sanos y salvos.

Es una etapa que va acompañada de culpa y los ojalás: “ojalá lo hubiese hecho antes”. Hay que recordarle a la persona que no es culpable de la muerte de nadie. La negociación puede aliviar temporalmente el dolor que conlleva un duelo. La negociación puede llenar las lagunas que generalmente dominan nuestras emociones fuertes, lo cual a menudo mantiene el sufrimiento a raya.

4. La depresión.-En esta etapa aparece un vacío y nuestro dolor entra en un nivel más profundo. Vamos de una forma más lenta, pero con ello se puede evaluar mejor la pérdida. Es una respuesta a la pérdida por tanto no hay que confundirla con enfermedad mental. Es una etapa bastante complicada porque no te animas a levantarte, faltan las fuerzas para retomar lo que normalmente se hacía. Todo parece vacío e inútil. Pero es un proceso normal, hay que vivirlo, aunque para la sociedad no sea  normal este proceso.

La  tristeza  y vacío nos permite explorar por completo la pérdida. Si se permite vivir la depresión desaparecerá cuando haya cumplido su propósito. Volverá de vez en cuando, pero así es como funciona el duelo. Una vez pasada la depresión la persona debe volver  a salir y hacer nuevas cosas.

No debemos evitar que la depresión normal nos acompañe.  La gente debe sentir depresión normal .Debemos  dejar que dolientes expresen pena .Hay que escucharlos.

Solo  si es depresión clínica hay que tratarla para evitar deterioro mental. Hay que diferenciar la depresión normal con la depresión clínica. La primera es la tristeza que sentimos en determinado momento de la vida. Mientras que en la segunda  el estado anímico bajo de la persona puede ser a largo plazo y puede  englobar una serie de  penas no curadas. En la clínica incluso se necesita medicar, porque la persona no asimila el apoyo. En algunos casos la persona debe ser tratada  con una combinación de apoyo, psicoterapia y medicación antidepresiva.

5. La aceptación: En esta etapa se acepta la realidad de que su ser querido se ha ido. Empezamos a vivir con nuestra realidad. No es el punto final, sino una experiencia más dentro del proceso que puede durar años, dependiendo del caso. La curación se refleja con distintas acciones. Dejamos de estar enojados con Dios. Tenemos más consciencia de la realidad de nuestra pérdida y que debemos seguir adelante con nuestra vida. Aunque a veces es difícil, debemos empezar a reorganizarnos y retomar incluso nuevos roles.

La aceptación no es una etapa es la que nos guste la situación que estamos experimentando, sino que  somos consciente de la pérdida y aprendemos a vivir dicha pérdida. No alcanzamos la paz completa, pero de forma gradual se hallará  algo de paz frente a lo que ha pasado.


Con el tiempo empezaremos a dedicarnos a la vida. Solo allí empiezan las nuevas relaciones o se dedica más tiempo a las antiguas.

miércoles, 25 de enero de 2017

Còmo poner lìmites a los adolescentes





La adolescencia es una etapa de muchos cambios.Es una de las etapas mas temidas por los padres por el temor a la rebeldía del adolescente.Pero los padres,deben saber que la rebeldía y la independencia que buscan es normal.Ellos necesitan  diferenciarse sanamente de sus padres e incluso aprender que patrones negativos de sus padres no repetir. Los adolescentes quieren saber quiénes son y que misión tienen en este mundo.

El desafío mas grande para los padres es lograr un equilibrio entre la libertad y la autonomía que piden los adolescentes para evitar tensión y conflicto entre padres y sus hijos.Es una  esta etapa en que las actitudes de los padres ayudaràn a desarrollar responsabilidad o ligereza  frente a la vida.

También es necesario recordar que aquí, en este periodo, hay desarrollo hormonal y físico. La sexualidad y los amigos toman relevancia para los adolescentes.Por estas razones te dejamos las siguientes recomendaciones para desarrollar una comunicación y relación mas sana con tus hijos :

1.La rebeldía es normal en esta etapa.No te asustes.Los chicos han crecido y pronto pasaràn a la etapa adulta.Ellos quieren diferenciarse del adulto,están buscando saber quiénes son.Las normas no deben ser tan rígidas, no debes tratarlos como a niños porque ya no lo son.Tampoco vayas al extremo de dejar que hagan lo que quieran.Ellos necesitan aún del adulto para pasar esta etapa con éxito. De cómo los guiemos dependerá su futuro,pero recuerda,mientras mas rigidez mas rebeldía. Tienes que soltar y jalar. Así funcionan las relaciones.Pero, eso si, debes ser muy estricto frente a cosas negativas como: vicios, malos amigos, llegar tarde a la casa y ,peor aún, dejar que llegue a la casa cuando él o ella quieran. También deben cumplir con los horarios de llegada que tù estableces.

2.Las reglas con ellos deben ser muy claras y los dos padres deben trabajar como un equipo para evitar  que pasen por alto las reglas. Háblales firme,claro,pero siempre guardando el respeto.No necesitas dar explicaciones largas,ni gritar y peor ponerte a discutir con ellos.Si ya tienen las reglas claras y, bien definidas las consecuencias que sufrirán, si no  cumplen las normas,simplemente queda aplicar y no negociar.Por favor, no negociar,no se ablanden.El adolescente debe aprender a responsabilizarse y debe saber que,cada acto incumplido o cada acto negativo suyo, tiene una consecuencia.

3.El adolescente, por lo general, es aburrido,así que no necesitas tenerlo siempre contento.No tengas miedo de decirle no cuando sea necesario.Ellos quieren siempre estar saliendo y divirtiéndose,pero no siempre les vamos a complacer. Necesitan que su tiempo se distribuya entre sus responsabilidades del colegio, la casa y sus momentos de placer.No siempre tiene que ser placer,no siempre tiene que darse regalos si nos  hay cumpleaños.Lo mas hermosos de la vida es recibir algo en el momento adecuado.Y si les enseñamos a esperar,y a tener las cosas a su tiempo,ellos crecerán con responsabilidad;pero si  accedes a todo, por temor a los lloros,o los enojos,entonces vas a tener toda la vida un hijo manipulador, que te harà escándalo en todo lado,no te obedecerá y te faltarà el respeto.

4.No pierdas la autoridad de padre.Tus hijos necesitan que tù les ayudes a crecer sanamente.Sè ejemplo para tus hijos.Ellos están mirando lo que tu haces.No sean incoherente.Si les dices que no debe beber alcohol,entonces no bebas tù. Si le dices que no es bueno el cigarrillo,entonces,  tù no lo hagas.Si gritas y faltas el respeto, entonces cómo quieres que ellos se calmen o les tengan respeto.Estos actos incoherentes son los que  hacen perder autoridad.

5.La adolescencia es una etapa de maduración y grandes cambios.El cerebro del adolescente entra en un periodo de reorganización entre los 12 a los 25 años.Es en esta etapa donde recién se esta desarrollando la parte pre-frontal del cerebro, que corresponde a los impulsos,juicios y decisiones.Es decir, el mundo afectivo del  adolescente se altera en una etapa en las que las emociones y las decisiones racionales aún están madurando.Por esta razón,los adolescentes son tan impulsivos,no le tienen miedo a nada y quieren correr todo tipo de riesgo.Se consideran los salvadores del mundo."Ellos lo pueden todo".La presencia de los padres son de vital importancia en esta etapa,ya que ayudaràn a controlar sus impulsos con  amor y disciplina firme.Los padres son un muro de contención para las locuras de los adolescentes. Es una etapa donde mas necesitan de sus padres,de su amor,de su aprobación,de los abrazos y de los "No" firmes.Necesitan de padres que no se den por vencidos frente a sus intentos de manipulación y expresiones fuertes.

lunes, 23 de enero de 2017

Once claves para frenar las rabietas de los niños



Un berrinche o rabieta es un estallido de las emociones y se da cuando un niño no puede obtener lo que quiere. Por lo general, ellos piensan que deben obtener todo, en especial cuando son muy pequeños, donde son muy egocéntricos  y dicen “solo para mí”. Pero el niño debe aprender que no todo puede obtenerlo o no todo es bueno para él. El niño necesita decepcionarse, pasar por la tristeza  para aprender a esperar.

La especialista, Guadalupe Zaghinni, afirma que desde pequeños debemos enseñar  que no todo lo que se quiere se lo obtiene de inmediato. Pero también dice que es necesario esperar y otras veces esforzarse. Señala que, como padres, debemos enseñarles que cuando hay adversidad, hay que salir adelante.

Te dejamos con las siguientes claves para regular esta conducta:

1. Poner atención a la intensidad  de las reacciones. En los primeros años es normal que el niño sea atendido en sus necesidades básicas. Pero a partir del año ya hay que empezar a enseñar a esperar. “Mami está ocupada, espérame un momento”, por ejemplo. De esta manera el niño se autorregula sanamente y aprende a esperar.

2. Cuando los niños se expresan de manera equivocada, con rabietas y berrinches, quiere decir que en casa no se le ha dado una estructura correcta frente a sus pedidos. Es decir, no les hemos enseñado a esperar o les hemos dado las cosas de inmediato para evitar sus bullas.

3. Es importante el ejemplo que recibe de los padres. Es bueno que te  preguntes como padre: “Yo como padre también actúo así? ¿Yo espero o quiero las cosas ya? Recordemos que los niños aprenden lo que ven en sus padres, por eso, hay que tener mucho cuidado de cómo son nuestras reacciones frente a  nuestras frustraciones.

4. Si ya las rabietas ya son frecuente y tenemos niños tiranos, hay que empezar nuevamente. No darnos por rendidos. Nadie nace aprendiendo a ser padres, pero es momento de empezar a actuar con firmeza, pero también con amor. Podemos decirles: “Tienes derecho a estar enojado, pero no tienes el derecho de hacer daño a otros. Quiero que te calmes y luego hablamos”. Entonces  después de que se calmó, hablar acerca de su actitud  y decirle que no se  va a permitir que actúe de esa manera. Finalmente, se le explicará las consecuencias que traerá su comportamiento.

5. Evitar caer en la amenaza. Muchos padres caen en la amenaza y los chicos llegan a funcionar de esa manera. “O te portas bien o de quito la tele”. Con ello estamos demostrando que no podemos tener el control sobre ellos. Y que solo obedecerán por miedo. No queremos que nos tengan terror a los padres, sino que sean colaborativos, solidarios.

6. El padre debe saber que no puede frustrarse con la frustración de los niños. Tenemos que calmar a los niños, pero primero debemos calmarnos nosotros como padres. No podemos ponernos a gritar igual que ellos porque nosotros somos los adultos.

7. Evita caer en la culpa. No debes sentirte culpable de disciplinar de manera adecuada. Los niños necesitan corrección de sus padres. Y cuando habló de corrección, no hablo de golpes o gritos, sino de  reglas muy claras para que no haya contradicción. Los dos padres deben estar en acuerdo de las normas y hacer cumplir las consecuencias con firmeza, pero no con grosería.

8. Validar al niño. No podemos decirle eres un niño malo porque  bajamos la autoestima. Lo que se trata es de enseñarle a moldear su carácter. Puedes decirles: “Entiendo que  quieres el juguete, pero primero la comida” “Debemos comer lo que hay”.

9. No aplicar la ley del hielo. Muchos chicos usan las palabras te odio, muérete. Es parte de la respuesta de frustración de un niño. Está lleno de rabia, pero en el fondo no  lo  sienten así. Hay que corregir. Decirle como te está afectando sus palabras:” Lo que me dices me duele porque te quiero” “Me lastima mucho, pero entiendo que es parte de tu cólera, es parte de tu frustración”

10. Niño único y que pega a otros. El niño único está acostumbrado a tenerlo todo, no quiere prestar. El niño es egocéntrico. Hay que decirle que no se pega y tranquilizarlo. Aquí de igual manera debemos calmarnos y  luego se calmará el niño. Luego de 15 0 20 minutos decirle: “Ahora si vamos a pedir al niño el juguete".


11. Establecer rutinas. Estructurar un horario. Horario para todo, pero sin llegar  a la rigidez. Y si el niño quiere ver  televisión antes de comer, podemos decirle: “Primero debemos  comer y luego ver t.v". Evitar las contradicciones que es un error muy frecuente donde el adulto no deja ver al niño su película, pero el adulto si ve sus novelas. Si el niño aprende un orden, irá desarrollando  confianza con el mundo. Si no hay orden el niño crece con mucha ansiedad. Si el niño ve un mensaje de contradicción empezará a manipular.

sábado, 21 de enero de 2017

Niños:Tres razones por las que los niños roban



Ningún niño no nace cleptómano o nace con una conducta inclinada al robo, a la mentira, a la pelea. No hay estructura en la mente que diga que el niño nace dispuesto a tomar esas actitudes o comportamientos. Simplemente es aprendido en el hogar, en la sociedad o hay un trastorno mental.

Hay que trabajar en la infancia o en la adolescencia antes de que sea demasiado tarde. La edad de la adolescencia va de los 12 a 18 años, el púber de 9 a 12 años y pre púber debajo de los 9 años.

Hay que enderezar a los hijos antes de los 18, así se evitará una personalidad antisocial, de peligrosidad dependiendo de dónde incurra el delito porque puede ser que mienta, robe, pelee. Allí en esas áreas hay que trabajar, siempre buscando la raíz del problema.

Los seres humanos se construyen en el hogar, la familia, la escuela y la sociedad. Si el hogar anda mal, la escuela manda mal y la sociedad anda mal,  vamos a tener muchos seres humanos mal formados y violentados la norma de convivencia pacífica. La base moral y afectiva es importante para el crecimiento.

Etapas del robo
A los años dos a  tres se considera una conducta normal porque los niños son egocentristas. Todo lo que les gusta lo toman. No tienen el sentido de lo que es tuyo o es mío. En esta etapa hay que ir de la mano con el niño a devolver el objeto para que el niño tenga la seguridad que esta actitud no está bien, pero que no sea con golpes o regaños. No se debe usar la frase:” eres un ladrón”.

Los padres, en esta etapa, deben relajarse porque su conducta es natural, pero debe ser corregida .Es necesario ahondar en el valor de la honestidad y la  responsabilidad de actos y, por ello, desde pequeños se les ayuda a devolver objeto que no es suyo. Los papis no deben escandalizarse en esta etapa, pero si deben preocuparse a partir de los seis años en adelante, donde allí ya es una conducta  consciente.

El niño en pre kínder que toma algo, sabe que no es suyo pero se lo lleva. Si no se ha hablado con ellos de la forma correcta o se les  ha golpeado mucho, entonces el niño manifestará trastornos en cuanto a control de esfínteres y se hará hace pipi, popo o  romperá cosas. Eso quiere decir que la mamá no está haciendo  la conexión de emociones de manera correcta, ya que allí hay que tomar en cuenta que el niño lo que está tratando de decir es: “estoy perdiéndote mamá”

En los inicios, esta actitud  de robo en  los niños se da por impulsos. La madre puede tomar dos caminos: castigar en extremo con golpes, y el otro que es pasarlo por alto. Pero hay que entender que el niño está  satisfaciendo un deseo, está pasando una etapa de frustración. Y superar la frustración es algo que se aprende, pero no a golpes.
El niño más grande, de seis en adelante, ya sabe que es coger algo que no le pertenece. Y si es muy recurrente el problema ya es psicológico.

Un niño que roba es diferente a los tres, cuatro, púber y adolescente. En la adolescencia lo común es: Préstame tu lápiz, pero no lo devuelve. Es una forma enmascarada de robar. Ya no lo roba directo, sino que lo toma como una broma.

 Las razones:
a. Los niños los toman o bien porque no tienen o porque se les da todo muy fácil. Pero hay niños que  lo hacen por una vez y nunca más lo hacen cuando se les corrige.
b. La segunda razón es que  el tema del robo tiene que ver con una respuesta a un sentimiento frustrado y directamente  con la mamá. Tiene que ver con un amor no correspondido por la madre en etapas tempranas: bebe, niño de 0 a 2 años. De una desatención o respuestas equivocadas que pueden tener la mamá con este hijo desatendido. Por ejemplo el niño pequeño que ve nacer a un nuevo hermanito y, que  empieza tomar cosas, se resigna a que está perdiendo amor de mama, pero no entiende que  la madre debe atender al bebe; entonces, mamá para corregir las cosas que toma el niño, le da manazos, le habla, le recrimina, etc. En este caso, la mamá no entiende cuál es el origen del comportamiento solo está juzgando el hecho. Lo correcto es enseñarle que las cosas tienen límites y que hay nuevos roles que cumplir y demostrarle que no lo dejarán solo. Pero si se lo castiga con agresividad, robará más o mostrará otras actitudes para llamar la atención de la madre.
c. La tercera razón son los factores  familiares: separación de los  padres, falta confianza con los  padres, soledad, depresión, autoritarismo de los padres, ansiedad, un nuevo hijo, etc.

Robo persistente
El niño que roba frecuentemente está buscando  afecto o está tratando reencontrarse con su mamá.  Por eso las mamas, al tratar de corregirlo, deben saber esto y tener paciencia. Este es el origen de la cleptomanía, es la dificultad de entender que su mamá ya no le pertenece, que él ya creció.

El componente psicológico es problema. Hay carencia afectiva importante, hay una carencia emocional inestable. Cada vez  toman más cosas y no les satisface. Ahí se vuelve problema y hay que buscar la raíz.

Muchas veces este tipo de robo persistente o psicológico está relacionado con la mentira. Mentira y robo está relacionado con la frustración: el no saber cómo llevar la frustración o cómo enfrentar una pérdida o una situación estresante o ansiosa que está viviendo en su entorno.

¿Cómo ayudar?
1. Muchas veces pensamos que al año los niños son muy pequeños para ser corregidos, pero desde allí toda conducta debe ser corregida: berrinche, mentiras, tomar cosas, gritos, etc. No hay que esperar a los tres años para ir diciendo lo que está bien o mal. Mientras más nos repiten, más consientes somos y  nos  vamos grabando lo que nos dicen. Lo mismo con los niños.

2. Al cuarto y quinto año, no etiquetarlo “haz robado, eres un ladrón”. Enséñele a devolver las cosas,pero evite dañar su autoestima.No golpee,no grite.Se firme,pero trate con misericordia al niño. 

3. De seis años en adelante profundizar  en el origen del robo. Trabajar directamente con padres, más que con los niños. Ya que depende mucho lo que los padres hacen o dicen y cómo esto está influyendo en la vida de sus hijos o cómo lo están interpretando.

4. El ejemplo es importante, si los padres entra al cuarto de sus  hijos deben  pedir permiso para tomar algo de su cuarto. Esto ayuda a que el niño sepa o tome consciencia de que es correcto pedir permiso para tomar algo. El respeto debe ser paralelo, los niños también deben ser tratados con respeto, sin gritos o golpes

5. Hay que ser abiertos a escuchar a los  hijos,  no desprecien su edad. Ellos tienen sentimientos, deseos igual que el adulto. No es que yo mando en casa y tu opinión no vale. Por esto los niños sufren ansiedad y depresión. También la ausencia de padres en casa los afecta.

6. El tiempo debe ser de verdad compartir con ellos, no solo para mandar o poner reglas, sino para jugar y estar presentes en sus vidas, cuando tienen inquietudes, y cuando hay que poner límites, hacerlo sin ir a los extremos. Si un niño no tiene ese afecto  va a coger cosas para llenar el vacío o va a demostrar cualquier otra actitud negativa.

7. Hay que tener cuidado como se reacciona, caso contrario, se queda fijado en el pensamiento una idea negativa en los niños. Por ejemplo: el niño dice: “como no pude conectarme con mamá sigo robando” Los adultos que roban dicen: “no pasa nada si me llevo la cinta scotch”





jueves, 19 de enero de 2017

Síndrome post vacacional en los niños: seis claves para ayudarlos a volver a clases con ànimo





Retornar a  clases luego de vacaciones es algo pesado para los niños, en especial si son pequeños. Por ello, es importante que los padres los ayudemos a volver a sus actividades normales con una actitud positiva. Pero si los padres también nos contagiamos del síndrome vacacional tendremos doble problema. Es preferible que tú como adulto primero lo superes y luego ayudes a tus pequeños. Tú como adulto primero debes tomar la actitud positiva de volver a la vida normal, caso contrario terminarás contagiando tu ánimo negativo a los más pequeños.

Te dejamos estas cinco claves:
1. Unas dos semanas antes de volver a clases, debes empezar a retomar el horario normal de todas las actividades. El horario de levantarse, de acostarse, de desayunar, de realizar las actividades del día en la casa, realizando varias tareas. Esto evitará que tus hijos vayan mal humorados y entren en un periodo de  irritación el momento de entrar a clases.
2. Es importante realizar algún repaso de las materias que reciben tus hijos, en especial en las que tienen bajo rendimiento. Tú debes establecer un horario para repasos en ese período que ya se acerca clases. De esta manera irá con refuerzo especial desde casa y  le será más fácil seguir el ritmo de las clases.
3. Transmite a tus hijos el deseo de encontrarse con sus amiguitos de la escuela. Háblales de lo que podrá hacer con ellos y cómo pueden aprender juntos. Hablarles de esta manera les hace ver el regreso a clases de manera positiva. Sabrán que también la escuelita tiene cosas buenas que ofrecer. Es muy importante que los padres impriman en la mente del niño una imagen positiva de las maestras, de los compañeros y de las actividades escolares. Solo así el regreso a clases se volverá más interesante para los chicos.
4. Cuando ya sea tiempo de entrar a clases, ayúdale a preparar la mochila y todos los materiales, poniendo hincapié en que es bueno retornar a clases y que todos deben empezar nuevamente a realizar actividades. Hay que dejar que ellos mismos guarden sus cosas según el horario que tengan, para que desde ese momento vayan organizándose.
5. Habla con la maestra de tu hijo y dile que, siempre que muestre pereza, lo anime a realizar sus tareas  y a compartir las actividades de aula con sus compañeros. Los niños siempre necesitan un empujoncito para rendir mejor. Si la maestra está pendiente de ellos, sabrán que no pueden hacer lo que quieren.
6. Pon límites correctos a su actitud negativa. Si  los chicos no quieren retomar sus actividades normales tras varios días, pese a que  ustedes como padres han dado el ejemplo de tomar con actitud positiva, entonces deben empezar a poner nuevamente las reglas claras en cuanto a lo que hay que hacer. Pònles consecuencias a su pereza o incumplimiento de tareas. No se puede permitir que hagan lo que quieran. Nuestros hijos deben saber que ellos tienen una responsabilidad y que tienen que cumplirlas o caso contrario tendrán una consecuencia.

martes, 17 de enero de 2017

El poder sanador del amor:Cinco claves para ayudar a una persona en crisis




La historia que les cuento a continuación es real y tiene como objetivo resaltar el poder sanador del amor en las personas lastimadas y heridas dentro de nuestro espacio familiar. El amor, los abrazos, el escuchar sin juzgar, sana un corazón herido.

Jenny tuvo una infancia de pobreza y soledad. Sus padres trabajaban todo el día. Ella y sus hermanos luego de regresar de la escuela, pasaban solos, a veces sin comer. Jenny era muy sensible y se daba cuenta de la triste vida que vivía. Cuando llegó a su adolescencia su vida era un cumulo de tristeza y depresión y avanzó así hasta la vida adulta. No encontraba con quien conversar, ni siquiera con sus propios hermanos. Como creció con muchos temores y miedos, tenía pavor acercarse a la gente. No quería ser herida, pero tampoco quería que la vean débil. Su carácter era muy fuerte y nada la doblegaba.

Un día, su madre enfermo y murió. Ella se sintió más sola que nunca. Se deprimió pero no buscó ayuda. Pasaron los días y ya no se pudo contener. Recordó a su hermana menor y recurrió a ella. Pudo contarles algunas cosas que le estaban ocurriendo en sus emociones. Su hermana la abrazò, la escuchó sin juzgar, le dijo cuanto la amaba. Fue desde entonces que empezó a sentir que el mundo es diferente. Jenny por primera vez se sintió amada y comprendida. Pasados los días y el seguir en contacto con su hermana le ayudó a tomar fuerza. Su vida ha transcurrido y sigue  teniendo una relación estrecha con su hermana.

Jenny, que ahora es consejera familiar, ahora nos comparte estas cinco claves para ayudar a una persona en crisis:

1. El poder del amor es tan grande que nadie puede privarse de recibir el amor. Si carece de amor la persona en crisis, carece de todo sentido de vida. La persona puede morir por falta de amor, literalmente. Esta más que comprobado científicamente que las personas necesitan del amor.

2. El amor se expresa a través de escuchar a la personas en crisis. Si en tu casa, uno de tus familiares o hermanos, te busca porque tiene confianza, no dudes en escucharlo/a con toda sinceridad y sin juzgar. Solo escucha, escucha y escucha.

3. El amor se expresa a través de los abrazos. Tienes que aprender a abrazar. Los abrazos son calidez para el alma y el corazón herido. Abraza a la persona en crisis las veces que sean necesarias y más si es tu hermano o hermana.

4. El amor se expresa en llamar a la persona en crisis. Si sabes que una persona o tu familiar que vive lejos están en crisis, llámala, preocúpate por saber cómo está. El saber que alguien se ocupa de esa persona, le llena de esperanza  y confianza frente a la vida.

 5. Preocúpate sinceramente por saber cómo se encuentra la persona en crisis. No dejes de llamar, de visitar, de abrazar, de escuchar. Con el tiempo una persona en crisis sana completamente. Su razón de la crisis es que ha estado mucho tiempo viviendo solo/a su crisis, sin compartirla con nadie.




Misiòn, visiòn y contàctos

Apoyar a las familias a fortalecerse emocionalmente y personalmente,a través de información útil, concreta y profesional.

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lunes, 16 de enero de 2017

Nueve claves muy prácticas para controlar la ira



La ira es una emoción muy compleja y difícil de manejar. La ira es una emoción primaria natural. Hacia cierto sentido es bueno tener ira, porque así nos podemos indignar y reclamar por algo injusto. Pero si la ira es permanente y muy intensa, esta ira es dañina porque puede llevar a la agresión de uno mismo y los demás.

Las manifestaciones negativas de la ira son: amargura, enojos, gritos, los insultos, ironías. 

Causas:
La ira surge cuando se experimenta injusticia real o imaginaria. Surge enojo también cuando vemos que un familiar es víctima de enojo. 

Hay otra razón por la que surge la ira. Las expectativas no satisfechas llevan a la frustración. Es decir, lo que no se logra, lleva a la desilusión y frustración que genera en posibles respuestas negativas como ira intensa.

Una tercera razón puede ser por cosa que pasaron en tu infancia y que no pudiste controlar. Tú mente guardó una gran mentira: “solo con la violencia se logra todo”. Esta mentira hay que sacarla porque no se necesita la violencia para obtener algo, la paciencia es mejor.

¿Qué es lo correcto?
Una respuesta positivas es cuando llegamos a entender que las cosas no siempre se darán como pensamos o queremos. Algo siempre fallará porque el ser humano comete errores. Errar es de humanos y, con ello, aprendemos a corregirnos  para crecer.

Los vasos de cristal sí se rompen. Muchos piensan tan egocéntricamente que nadie debe romper un vaso, o que no se debe cometer un solo error. Castigan verazmente cuando una persona falla. Esta actitud egoísta hace mucho daño y la persona debe cambiar. Debe saber que no siempre él o ella será el centro de atención y que no siempre obtendrá lo que quiere en el momento que quiere.

En general debemos aprender a entender como interpretamos el mundo y cómo funciona la vida. No siempre será como queremos. Debemos recordar que el ser humano es valioso y significativo, pero  no todas las circunstancias de la vida y expectativas están a disposición de todos o en el momento en que se espera. Este mundo está lleno de frustraciones, tensiones, exigencias y, para muchos, es difícil dar una respuesta.

La ira enferma a la persona
Gritar, ser irónico o golpear es una reacción agresiva. Es problema cuando es intensa, con mucha frecuencia o se expresa de manera inadecuada. La ira intensa o frecuenta causa estrés físico extremo en el cuerpo.

La ira es un sentimiento que encubre otros sentimientos.
 La ira es la que más se expresa, pero hay que estar atento a los sentimientos que oculta la ira o que encubre. Por ejemplo si  a una persona le dicen que lo van a despedir y, si más es hombre, este no expresara el miedo y el temor sino que se mostrara contrariado y enojado. O si una mujer es maltratada, no expresará  tristeza o frustración, sino enojo y gritara y sermoneará a la familia.

Claves para controlar la ira
La ira no desaparecerá, es un mecanismo natural del ser humano, pero si se puede canalizar de manera adecuada.  Se debe crear un espacio para su manifestación sana, sin dañarse ni dañar a otros. Entre más enojo y agresión, más ira. Es como un embudo, mientras más se contenga las otras emociones, más saldrá la ira. Por tal motivo se recomienda lo siguiente:

1. Debes ampliar las emociones. Identifica la emoción correcta y evita caer solo en el enojo. Por ejemplo, si  la persona que pierde su trabajo expresa en realidad la tristeza o temor, disminuirá su ira. Además recibirá más apoyo de la familia.

2. Hay que  aprender a ver el punto de vista de los otros. Solo así podemos ver si estamos equivocados o no y si se justifica nuestra ira. La ira sale cuando se interpreta un hecho a la luz de lo que yo quiero y las cosas que no salen como se quería o esperaba.  Un enojo mal sano no permite disfrutar de la vida. Cuando la persona no solo piensan en su punto de vista, sino que mira el del otro, deja su egocentrismo y de esa manera es más fácil disminuir el enojo.

3. El enojo puede ser fruto de interpretaciones erradas acerca de los acontecimientos. Quienes se enojan fuerte y frecuentemente deben pensar en las interpretaciones de las situaciones que les hacen enojar.
¿Qué cosas me hace enojar?
¿Qué pienso de lo que está ocurriendo?
¿A qué le temo? ¿Es una amenaza a qué?

4. Busca una actividad que te calme. Puede ser ir al jardín a arreglar las plantas, o salir de paseo al parque cercano. Ve al jardín o a un lugar donde puedas respirar hondo y pensar. El aire si oxigena el cerebro y calma las tensiones.

5. Si estas a punto de explotar, ve a un lugar apartado y allí grita o desfoga tu ira, pero eso sí, evita dañarte. Es preferible que salgas a que te quedes para discutir o pelear.

6. Cuando te hayas calmado, aborda el tema con tranquilidad con la o las personas que hayan provocado tu ira. Practica lo que vas a decir. Nunca te quedes callado. A veces es difícil hablar, pero debes hacerlo, caso contrario irás guardando resentimientos.

7. Investiga otras causas que te están provocando ira. Quizá sea algo que pasó en tu infancia: impotencia, violencia que no pudiste parar y, por ello, tomas este mecanismo de defensa, pero debes saber que las mentiras del pasado hay que sacarlas  y buscar otra forma de actuar porque si las hay.


8. Busca ayuda si no puedes controlar tu ira por más que lo intentas. Ten ánimo, sabemos cómo luchas y lo difícil que es. Pero busca ayuda y verás cómo cambia tu vida.


Cinco claves para derrotar al temor y ansiedad



El temor surge ante una situación real de peligro o amenaza. El temor es un mecanismo de  defensa que tenemos para enfrentar cualquier peligro, por tanto es bueno. Se convierte en malo si es persistente y nos lleva a la ansiedad.

La ansiedad es una sensación inquietante de que algo va a suceder. La ansiedad puede manifestarse como irritabilidad e ira; reacciones de preámbulo para un ataque o huida. Es decir, de la ansiedad podemos pasar al estrés.

Parte del origen de la ansiedad surge en algunas experiencias de la infancia. Allí se sembró la inseguridad y la fragilidad emocional. Las situaciones que vivimos crearon en nosotros una serie de interpretaciones acerca de la vida y éstas interpretaciones o mentiras están grabadas en la memoria. Por ejemplo, si los padres se divorciaron cuando fuimos pequeños en la mente se guardará la siguiente mentira: “nada es seguro en esta vida"

Por ello, la sobre protección,  la negligencia, el abandono total o parcial y las constantes amenazas de abandono o divorcio, dejan mentiras en nuestra vida que hay que romperlas de forma urgente.

¿Cómo puedes superar?
1. Identificar la imagen o recuerdo. Puede ser un recuerdo que viene muchas veces a la mente o  una experiencia reprimida lo que es causa de la personalidad múltiple. Una vez identificado el recuerdo, las probabilidades de superar son bastante altas.

2. Identifica la mentira que fue plantada en la mente durante el trauma o experiencias vividas. Recuerda que la mentira fue pronunciada por alguien y todo lo que dijo fue de forma ilógica, muchas veces sin pensar en el daño que iban a provocar.

3. Si fuiste herido/a, necesitas reconocerlo y empezar a trabajar con este problema. Busca ayuda si no puedes hacerlos solo/a. La ayuda profesional siempre es una guía para el corazón herido o roto.

3. Reconocer que necesitas ayuda  es importante. Hay que derrumbar las mentiras y, para eso, solo necesitas ser ayudada/o, pero si no te dejas ayudar, las mentiras seguirán en la mente afectando más y más.

4. Este proceso implica otros procesos como: llegar al perdón, reconocer qué fue tu responsabilidad y qué no fue tu responsabilidad. El perdón es una parte importante para sanar y empezar a vivir una vida libre de odios, venganzas o resentimientos.


5. Seguir buscando, una a una en la mente,  las mentiras arraigadas y que te están dañando emocionalmente. Esto será posible es la medida que te involucres.Solo tú tienes la decisión de hasta dónde les permites actuar a esas mentiras. Te animo a no rendirte, a ser honesto/a contigo mismo/a y libérate de esas ataduras.

viernes, 13 de enero de 2017

Siete barreras que debes destruir ahora para mejorar tu calidad de vida


La vinculación es la cura para para muchas enfermedades. Cuando reconocemos que necesitamos de los demás podemos recibir amor y nuestros vacíos se llenan. Por eso, las personas que necesitan de otras personas son las más afortunadas del mundo. Gracias a la necesidad, las personas y Dios pueden encontrarnos para brindarnos su apoyo.

No obstante, pese a que es bueno tener vínculos, hay algunas barreras que ponemos las personas, pero necesitamos derribarlas. Aquí te dejo esta descripción:

1. Heridas de pasado. Nuestra confianza se desarrolla en la infancia. Depende del cuidado de nuestros padres la percepción de que el mundo es confiable o no. Amamos porque nuestros padres nos cuidaron. Si somos bendecidos con cuidadores amorosos que satisfacen nuestras necesidades, desarrollamos el sentido de la confianza. Comenzamos a ver al mundo como un lugar confiable. Pero si por el contrario, solo recibimos golpes, gritos, crítica, odio, ofensas, entonces aprendemos que el mundo no es bueno ni confiable. Al aprender que el mundo es bueno y confiable podemos relacionarnos con otros y podemos dar y recibir amor. Pero si aprendemos que el mundo no es confiable nos ubicamos en la posición de: “no necesito a nadie " ¿Qué hacer?: Debemos ir actualizando nuestra memoria, debemos ir tomando las cosas buenas que nos han sucedido y las malas dejarlas en el pasado, caso contrario esta berrera para relacionarnos permanecerá intacta, lo cual no es bueno. Si no podemos hacerlo solos, hay que buscar ayuda profesional para encontrar el perdón y la paz del corazón.

2. Pensamientos distorsionados. “soy malo”, “no soy digno de ser querido, “algo de mi espanta a las personas”. Todos estos pensamientos no permiten la vinculación. Si bien es cierto que puede haber pasado en la infancia que no fuimos amados o que nos abandonaron, y crecimos con estos miedos de rechazo, sí podemos trabajar en nuestra mente y empezar a construir nuevos pensamientos. Sí tenemos derecho a ser amados ahora que somos adultos y también podemos dar amor. Lo recomendable es que hables de este dolor, lo dejes salir y empieces a darte una nueva oportunidad.

3. Sentirse diferente. Debes aceptarte cómo eres. Todos tenemos errores y debilidades. Todos en algún momento nos salimos de casillas y gritamos, o comemos demasiado o  nos sentimos incapaces de hacer algo. Ser vulnerable y fallar es bueno. La perfección, eso sí, no nos ayuda en la vida.

4. No merezco amor. La verdad es que el amor no se gana. Es simplemente algo que alguien decide sentir por nosotros. Y si alguien nos ama, hay que recibir ese amor.

5. Mis necesidades abrumarían a cualquiera. La realidad es que las personas necesitan ver nuestras necesidades para tener la oportunidad de amarnos y ayudarnos. No temas en contar tus necesidades, así evitarás quedarte aislado/a.

6. Mis sentimientos abrumarían a cualquiera. Esta convicción se debe a que en el pasado tal vez nadie nos apoyó. Pero no es cierto que ocasionará problema a la relación contar los sentimientos. Contarlos es bueno, pero recuerda contarlos a las personas adecuadas, quienes te pueden apoyar y comprender. Quizás anteriormente no le contaste a las personas adecuadas y te fallaron.


7. Las personas me controlarán. Muchas personas han sido golpeadas y controladas en una relación. Aprenden que la soledad es el mejor lugar, ya que no pudieron tener libertad. Lo cierto es que sí se puede tener libertad. Hay que aprender a poner límites correctos. Analizar qué relaciones me están ayudando a crecer. Decir no a las malas y si a las buenas.


jueves, 12 de enero de 2017

Salud emocional:los buenos vìnculos con otros son trascendentales



Tener salud emocional es muy importante para tener una vida equilibrada y sin muchos conflictos  en las relaciones interpersonales o laborales. 

La salud emocional permite tener una armonía entre lo que se piensa, se dice y se hace. Si se goza de salud emocional, la persona es feliz consigo misma. Por ello, queremos que identifiques aquellas cosas que pueden estar dañando tu salud emocional y que son las siguientes:

1. Sentimientos de falta de importancia. Las personas que se sienten así, por lo general, piensan que tienen falta de significado por no tener propósitos en la vida y se llenan de actividades, lo que les lleva más al aislamiento. La realidad es  que ganar más dinero o ser más exitosos no  trae satisfacción a la vida. Esto pasa por ejemplo cuando se ha perdido una relación y no se la ha reemplazado. Entonces entran en depresión, se aíslan, se separan de los demás y su visión sin esperanza los puede llevar a pensamientos suicidas. Lo mejor sería que cuando tengan estas pérdidas no se aíslen, sino que busquen ayuda.

2. Sentimientos de maldad y culpa. Una persona aislada tiende a  creer que es mala. Se sienten mal o culpables porque creen que no es querida. “Me siento solo por tanto no soy querido. Si alguien me quisiera estaría conmigo”. Sienten que han hecho algo malo y tratan de hacer muchas cosas para  quitar su culpa: confiesan su maldad, asisten a varias reuniones, son voluntarios, etc. Hacer todo esto no les quita la culpa. La realidad es que les falta relacionamiento, apego con otras personas para contarles cómo se sienten.

3. Adicción. Es una necesidad psicológica compulsiva de algo. Es decir, es algo que la persona necesita para sobrevivir. No son deseos reales, son un sustituto de la necesidad real. Por eso lo recomendable es descubrir la necesidad verdadera que esta enmascarada por el deseo engañoso. Por lo general, esta necesidad es vínculo con los demás. Las personas aisladas como no pueden entablar relaciones, buscan otra cosa. Pero lo que necesitan son conexiones amorosas con otros seres humanos. La adicción puede ser: al sexo, al alcohol, a las drogas, la comida, el juego, el trabajo, las relaciones destructivas, el logro, el materialismo, etc. La persona debe saber que las adicciones no satisfacen. Se debe trabajar con el problema real porque no se necesitan de esas cosas. Lo que se necesita son relaciones y sin ellas las personas no pueden vivir porque somos seres relacionales. Curar la adicción requiere de sensibilidad y humildad. Las personas deben admitir que necesitan de las otras personas. No todas las adicciones surgen por falta de relacionamiento o falta de amor, pero muchas sí.

4. Pensamientos distorsionados. Cuando la gente se cierra a otras personas, su enojo, tristeza y depresión interfieren con sus pensamientos  y se vuelven distorsionados. Un ejemplo de ello es la paranoia. La persona con este desorden sospecha y desconfía excesiva e irracionalmente de los demás. Temen que otros los lastimen y que no sean confiables. Por ello, evitan a otros y se aíslan. Cuando su mundo interno comienza a cambiar, su forma de ver el mundo externo y las personas cambian. No sanan si les decimos que cambien. Necesitan tener mayores apegos de amor.

5. Vacío. Las  personas que no pueden conectarse con los demás sufren de mucho vacío, lo cual es una experiencia muy dolorosa. No pueden sentir la necesidad de amor, ni sentir el amor que otros sienten por ellos. Para sanar y sentir alivio necesitan responder al amor de otros. Deben abrirse al amor que otros quieren darles, sentir los abrazo cariñosos de los demás. Deben dejar a un lado su criterio de que no necesitan de los demás porque si necesitamos de otros. Y por lo general, las necesidades del ser humano son más emocionales que físicas.

6. Tristeza. Las personas que se cierran a otras personas viven en profunda tristeza. La sanación a la tristeza es estar conectados a otros. Así que es necesario abrirse a esas conexiones.

7. Temores a la intimidad. Las personas que nunca han tenido un vínculo estrecho con otras personas, temen a la intimidad y evitan vínculos estrechos. La cura del temor es empezar a relacionarse y luego poner límites correctos, pero no aislarse.

8. Sentimientos de irrealidad. Las personas que no tienen relaciones estrechas no pueden experimentar lo que es verdadero. Pueden ver, oír y sentir a la gente, pero todo parece irreal. Lo mejor es aprender a relacionarse y experimentar lo bueno de tener buenos vínculos con otros.

9. La ira, enojo, furia descontrolado es un síntoma de que la persona esta asilada. La persona debe sentirse amada y aceptada  y su ira desaparecerá. La ira es una forma de protesta contra el aislamiento.

10. Cuidado excesivo. Cuando encontramos personas que son cuidadoras, encontramos a personas con carencia de relacionamiento. Podemos sentirnos plenos cuando nos relacionamos, pero si solo damos y nunca recibimos, negamos una parte de quienes somos y nos aislamos más. Necesitamos también pedir que  nos cuiden en esos momentos en que necesitamos de afecto y amor.


11. Fantasía. Las personas sin vínculos suelen crear amigos imaginarios y no experimentan lo real de una amistad. Para acabar con las fantasías o idealizaciones es necesario saber que una conexión es sanadora, el aislamiento solo profundiza el problema

Desarrollo personal: expresar la tristeza evita la depresiòn


La depresión es un desorden. Las personas deprimidas no funcionan bien emocionalmente. Pierden color de la vida. Estas personas han reprimido tanto el expresar tristeza e ira que han llegado a caer en la depresión. Les hace falta aprender a vincularse y relacionarse sanamente con otras personas.

Lo recomendable es expresar la ira o la tristeza porque solo así podremos expresar que nos falta amor, atención o que estamos sufriendo. El relacionarse ayuda mucho. Nunca sientas pena de expresar estos sentimientos, así no te sumergirás en la depresión. Siempre busca ayuda. Todos en algún momento entramos en depresión. Y hay forma de salir.

Un estado de depresión se caracteriza, por lo general, cuando interfiere con las actividades normales de la persona y, a veces, hasta la llega a paralizar a las personas. Se pierde toda capacidad de decisión y hasta el deseo de vivir.

Los síntomas de la depresión se dan tanto a nivel verbal como físico. Biológicamente, los estudios dicen que esta enfermedad afecta el hipocampo, lo cual  puede llevar a la depresión crónica a la persona.

Las cifras de la depresión van en aumento desde el siglo pasado hasta nuestros días, influenciado por el consumismo, el ritmo de vida rápido, demandas sociales y familiares y laborales que sobrepasa la capacidad y tolerancia de muchos que necesitan más tiempo para adaptarse.

¿Quiénes  pueden sufrir de depresión?

Las personas que sufren enfermedades como Alzheimer, Parkinson, Artritis crónica, lumbalagias, etc. Si la enfermedad lleva un largo tiempo, la persona cae en soledad y frustración. Los medicamentos que reciben también  pueden contribuir a este estadio, ya que tienen efectos secundarios, por eso hay que preguntar al médico que tipo de efectos puede provocar en la persona para estar preparados. Otro grupo de personas que sufren de depresión son aquellas que tienen sida, cáncer, lupus,etc.

También pueden sufrir depresión los adolescentes que están experimentando los cambios desde la adolescencia a la adultez, quienes han tenido pérdidas familiares, quienes enfrentan crisis matrimoniales, divorcios, separaciones; estas últimas, mantienen a las personas en alerta emocional para sobrevivir.

La intensidad y duración de los síntomas, determinarán si hay un estado de depresión crónica o profunda.

Síntomas:

a. Tristeza, inactividad, dificultad de pensar y de concentración.
b. Reducción o aumento del apetito y de dormir.
pensamientos suicidas o intentos de suicidio.
d. Preferir el mal tiempo porque coincide con la forma en cómo te sientes por dentro.
e. Pérdida del interés por  hacer las cosas
f.Falta de interés por estar con otros porque la simple actividad social no satisface lo que necesitan

¿Cómo  superarla?
1. Lo recomendable, cuando se detecta una depresión, es mantenerse en constante actividad laboral y social, evitar el aislamiento, ponerse metas, realizables y no difíciles; mantener una horario y rutina para descansar, comer y hacer otras actividades. Ser flexible consigo mismo y seguir instrucciones médicas.

2. Si los síntomas son intensos y la tristeza se vuelve persistente, hay cansancio, desmotivación o poco interés en las actividades cotidianas y relaciones afectivas, cambio en el sueño, pérdida de apetito, irritabilidad extrema, ideas sobre auto daño, pensamientos suicidas, es necesario buscar ayuda urgente con un especialista.

No tengas miedo pedir ayuda.Todos en algún momento lo y hemos hechos y hemos sanado.






Fuente:
Cambios que sanan
Mejor son dos que uno